SO WHAT, SO WHAT? SO WHAT?! ♪
- Larisa - LoQueArde
- 5 oct
- 2 Min. de lectura
Un himno punk que parece ruido, pero es radiografía
Ni nostalgia ni rebeldía: la dignidad mínima de seguir cantando cuando ya no queda nada
Hace más de dos décadas que escucho esta canción a todo volumen, y recién hoy me pregunté qué carajo era “Linoleum”.
Lo busqué. Y era el piso.
Un material barato, de esos que cubrían los departamentos viejos.
El narrador dice “My closest friend linoleum.”
Y no habla de una persona.
Ni del perro Bob que nombra en la canción.
Habla del suelo.
Del piso donde vive, del único testigo.
Y ahí entendés todo. Es una metáfora irónica, pero también brutalmente honesta.
El tipo no tiene vínculos humanos cercanos, así que su único amigo es el piso, ese mismo donde hasta su perro orina.
Eso es lo tremendo: la mezcla de miseria y ternura, de ironía y vulnerabilidad.
Es de esos temas que uno siente antes de entender.
Tiene esa energía torpe y sensible a la vez, ese ritmo que reconoce la intemperie.
Cuando entendés la letra, pega distinto: no es rebeldía, es aceptación.
Sí, estoy en el piso. Y el piso es mi amigo.
Y ahí entendí también algo del fuego:
no siempre quema hacia arriba.
A veces se arrastra, se mezcla con el polvo,
y aun así, ilumina.
Ahí entendés que Linoleum es, en el fondo, un retrato del desposeído lúcido: el que perdió todo lo material pero todavía conserva conciencia, humor y una dignidad rara que no depende de éxito ni de status.
Me gusta la gente que hace arte con lo que se rompe. Con lo que se cae, pero arde distinto.
Y vos, ¿qué canción creés que te estaba hablando de otra cosa todo este tiempo?
Así las próximas entradas llegan directo a tu bandeja, sin algoritmo de por medio.
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